Max fue rescatado Tatiana en la carretera de un pueblo de Sevilla. Cruzando la carretera de un lado a otro y comiendo de los contenedores
Max parece no haber tenido una vida fácil, huella de ello, es la gran cicatriz que cubre su pequeño cuerpo, en el lomo derecho. Es un perrito cariñoso, muy listo, sociable y alegre. Atiende a la orden de «sienta» por lo que seguramente alguna vez tuvo un hogar.