Otto

Otto se recogió junto a sus hermanos de un sitio bastante peligroso por la continua entrada y salida de camiones. Ellos habían nacido allí y habían tenido poco contacto con personas. Por ello aun le cuesta confiar y se muestra temeroso con las personas. Ya de deja tocar, pasear con la correa, le encanta jugar con sus hermanos en el campo… pero aún no es un perro que disfrute de las caricias, va a necesitar paciencia. Con otros perros es fantástico, se muestra sociable tanto con hembras como con machos.