A Tigre lo recogióde cachorrito un matrimonio mayor, tenía mal aspecto y muy delgado, los síntomas de cualquier cachorro sin alimentación en la calle. Lo llevaron al veterinario, lo cuidaron y, gracias al amor de esta familia, salió adelante, se ha convertido en un gato fuerte, cariñoso y juguetón.
Pero sus tres gatos muy muy mayores, una de 22 años, no aguanta la energía de Tigre. Su familia quiere el mejor futuro y hogar para Tigre, por este motivo llegó a nosotros.
Es cariñoso, juguetón, comilón y curioso, no le gusta el veterinario donde se estresa un poco, le encanta la compañía gatuna y dormir en la cama acompañado a tu espalda, está listo para encontrar un hogar.
Negativo a enfermedades.